Agudeza visual mínima para conducir

La agudeza visual se refiere a nuestra capacidad para detectar, distinguir o identificar detalles espaciales en buenas condiciones de iluminación. En España, la agudeza visual mínima para conducir es 0,5 para particulares y de 0,8 para conductores profesionales.

Aparte de la agudeza visual, debemos tener presente que existen otra serie de requisitos visuales para obtener el permiso de conducir que son importantes. Como por ejemplo nuestro campo visual, la sensibilidad al contraste, o la movilidad tanto de los párpados como del globo ocular.

La validez de un permiso de conducir de clase B son diez años y a partir de los 65 se renueva cada cinco años. Como es natural, en estos lapsos de tiempo nuestra visión puede empeorar. Cabe la posibilidad de que una persona pierda agudeza visual o sufra alguna enfermedad que afecte a su vista. En estos casos es responsabilidad del conductor evaluar su salud ocular para no poner en peligro al resto de conductores.

Por desgracia esto no siempre es así, y el último informe presentado por Visión y Vida lo pone en evidencia.

Estado de la salud visual de los conductores en España

Según el informe El estado de la salud visual de los conductores en España de 2017, unos 600.000 españoles conducen con una agudeza visual inferior a 0,5 como obliga la ley. Según los datos de los investigadores, con 0,4 de agudeza visual ya se triplica el riesgo de accidentes. Debemos señalar que con gafas, lentillas o cirugía refractiva casi cualquier persona menor de 65 años puede conseguir un 100% de agudeza visual (agudeza visual = 1).

Pero no se trata sólo de la agudeza visual, muchos conductores sufren otra clase de problemas de visión que afectan a la conducción. Los halos, deslumbramientos y los problemas de miopía nocturna son sólo algunos de ellos. En conjunto, los investigadores cifran en unos siete millones de conductores se ponen al volante con alguna deficiencia visual que afecta a la conducción.

Tras analizar los resultados, la asociación Visión y Vida ha realizado una serie de reclamaciones a las autoridades. Los principales objetivos serían reforzar las pruebas psicofísicas, exigir las mismas aptitudes psicofísicas a todos los conductores, así como un refuerzo de los requisitos visuales a los conductores profesionales y a aquellos con visión límite (agudeza visual = 0,1).

Además reclaman una mayor explicación y difusión de las consecuencias derivadas de una operación de cirugía refractiva. En la actualidad algunas clínicas oftalmológicas no informan al respecto y los conductores no siempre tienen claro cómo deben proceder.

Cirugía refractiva y carnet de conducir

Tras la modificación del Reglamento General de Conductores del año 2015, la ley establece que un conductor operado de cirugía refractiva pierde automáticamente su carnet de conducir durante un mes. En el caso de los conductores profesionales el periodo será de tres meses.

Tras estos periodos el conductor debe aportar el informe de la intervención para prorrogar su permiso de conducir hasta un año. En esta ocasión no será necesario volver a realizar las pruebas psicofísicas, con el informe del oftalmólogo es suficiente. Sin embargo, transcurrido ese año de prórroga si será necesario que le revisen la vista en un centro acreditado. Tras la evaluación y teniendo en cuenta el criterio del oftalmólogo, se fijará su nuevo periodo de vigencia del carnet de conducir.

Las revisiones de la vista son muy importantes, por eso deberíamos realizarlas periódicamente. A medida que envejecemos nuestro sistema visual no responde con la misma rapidez, podemos perder agudeza visual, necesitamos más luz para ver mejor y al mismo tiempo nos cuesta más recuperarnos de los deslumbramientos. En las clínicas Vistaláser de Málaga, Marbella y Granada nuestros ópticos y oftalmólogos pueden evaluar su salud ocular a fondo.

Más información: Informe de Visión y Vida